¿Adicción? ¿Puro placer?. Quién sabe qué ronda por su cabeza. Le gustaría saber qué quiere realmente, aclararse. Decidir si tal vez le guste más en chocolate con leche y pequeños trozos de galleta crujiente o el chocolate negro, que roza casi el sabor amargo.
Aún así, continúa probando otros sabores; chocolate con naranja, menta...¿Es mejor seguir? No lo sabe. Quizá el aroma le cautiva más que el propio sabor. Aunque puede resultar engañoso.
Es así y siempre lo será.
¿Quieres probar? -So sweet.